domingo, 14 de diciembre de 2008

EN LOS CAMPOS DE BAUDELAIRE


"De la evaporación del sentimiento,
-mar grandioso de inmensas oledas-
en el alma aparecen condensadas
las nubes del divino pensamiento"
(Nubes:Juan Ramón Jimenéz)


I.
Adorada diosa de nieve,
en tus brazos se vierten las orquídeas que arden en carmín,
los llantos blancos con que el enorme cielo te baña;
Oh diosa espiritual, dama de los labios de rubí,
por tus vitrales se filtra la querida libertad,
pícara melodía con acentos rimbaldianos,
tu imagen se construye de suspiros,
y por noches serenas que soplan en el pecho del enamorado.

II.
Heroína de ojos impenetrables,
frente a tus veredas se pasean la luna pierrot y su coro de nubes,
los témpanos y flores que se vestirán de traje en espectacular coloquio;
Rosa magenta nacida de las olas quebradas en la costa,
profanada y arrancada de un hechizo suntuoso,
bajaras a mis recuerdos por enmohecidos peldaños,
con cautela de no rasgar tus alas fugitivas de luciérnaga herida.

III.
espejo turquesa de mis sueños,
el ocaso te deshoja el cuerpo de azafrán,
mientras los ósculos rubios y rancios se alimentan en la lejanía de mis travesías;
Inmaculada resurrección de labios santos
germinada del insondable rayo de sol,
te cubren esencias de lugares comunes,
junto a tí, la gota dulce existe como recorridos celestes de lobo eterno;
Bienaventurada gaviota anacreóntica,
te tiendes en las lágrimas milenarias de nuestra madre lunar,
en tí, se regogen las distancias y las tardes suaves,
tras tu corazón se hunden las batallas del dragón incoherente;
Gacela de pies infecundos, bella como la hoja otoñal,
diáfana como un ejército de sílfides violetas,
ensayas de costado tu música de vientos,
bajo el portal de estelas que es tu morada,
desde tiempos mágicos e inmemoriales.

IV.
Risueña madeja de pensamientos sin resolver,
vertiginosa y benevolente eres,
que las fábulas de infancia escarben en tu lechosa figura de liebre cosmogónica,
y la den a conocer;
Las horas por tí transcurren, se deshacen como el tacto del colibrí,
giran como un pasar de locos,
mutando en dóciles doncellas de almas almizcladas;
genialidad única que en los cerebros se redacta,como cuervo sensual y abracadabrante,
reabsorvete en sepia y dejanos tus ilusiones malva,
tus perlas y tus trinos de ciervo inconexo;
Perfume que todo lo incendias, en tus hombros de cal y luz,
tu rayo profundo clareara el rostro de Hécate,
cuando mil brisas llenen las murallas reales de creación y praderas;
Adorada y felina,
en tus sílabas flotantes danzan las hierbas y balcones de la esfera de oro;
Fragmento lozano del Angelus,
comienzas a salir de la escarcha virgínea, que se ciñe una a una,
de tus evos extramundanos.




miércoles, 3 de septiembre de 2008

ISABEL


El manto espumoso
cubrió de ilusiones las rocas de sal.

El estruendo rompetímpanos iba y volvía,
pero la gaviota Isabel,
siguió parada en sus quebradizas patitas,
observando la inmensidad de su hogar.

jueves, 10 de julio de 2008

EL GENIO SE DESPLIEGA


Enviémosle al subsuelo
Para que contextualize el sentimientocidio que le embargó,
Para que se deje de niñerías y lave la desilusión de su cara;
Para que suelte el verbo que se enreda en su herida.

Enviémosle sin compasión,

A la civilización que un día le desterró,
Para que piense en el pavor que le dejó absorto
Cuando era almirante,
Para que piense en las mandíbulas que le acechan de lejos.

Enviémosle tal cual es,

Como bicho rastrero e inmortal,
Como mayordomo enramado a los cristales del jardín,
Como luciérnaga verde que anega sus reflejos
En el antro de la pérfida,
Como grito intestinal que tritura las jornadas del anciano.

Enviémosle al puerto retraído del cual fue proyectil encaracolado,

Al follaje que le vio crecer,
A la extravagancia de sus años mozos.




EL CARNAVAL TERMINÓ


“De la musique avant toute chose”


1
La música y las luces que encienden las ansias de libertad,
En una época de esplendor e ira
Contenida en un Do y un Re,
Que resuenan como victoriosos sollozos
Que al descomponerse
Se fusionan con las manos y la piel,
Que acarician
El frío y las noches
De mi juventud picoteada por palomas envenenadas.

2

En el centro de las imágenes
Se agolpa el sonsonete ebrio de una voz sin canción,
La pasión púrpura que nace de la mediocridad,
Que a modo de máscara
Se usa como la compasiva bondad de este irritante disfraz.

3

Las ideas no fluyen por si solas,
Hay que colorearlas y llevarlas a cabo
¡Que baile mi mente marginal,
Que de saltos de paupérrimo can de bigotes tiesos!
Lo que se posesiona de los sueños no existe como tal,
Lo que ocupa esta neutralidad del ser,
Se diluye en lo opaco de una simple situación
Que sólo se consigue aspirando enormes bocanadas
De indispensable espiritualidad.

EL RITO DE LA LUZ


“He ansiado alejarme del siseo
De la mentira desgastada”
(Dylan Thomas)

1
Dimensión de pezones y prepucio,
Deletreando huracanes y damiselas
Sobre el puro existir de esta triste criatura,
Sin armadura, sin virilidad.
Al Oeste de su espíritu
Se nutre la crisálida angélica,
Aquella que posa su quinta esperanza
En los reductos de una pasión
Falsa y mal apagada.

2

Agazapado en el pesar sin fin,
Va abreviando las reacciones de sus exangües latidos,
Con esta intensidad de linaje griego
De medulado maestro de la honra.
En el portal misterioso,
Danzan meretrices y proxenetas,
Danzan al ritmo de los tambores orgiásticos,
Al ritmo del tam-tam irracional.
Danzan para escapar de la realidad inconfesable
Que pareciera devorarlos por sus pecados de botella,
Por sus pecados de camas rechinantes y quejumbrosas.

3

Chispas surtidoras del semen dominguero,
De las ortigas y el sexo nocturno;
A caballo y sin dejar huellas,
Va soplando ejes en cada migaja pasada,
En cada afelpado cartílago de su hermafrodita vida.
Se conmueve tan fácilmente,
Con las lágrimas de un olvidado fraile
Con las colinas embalsamadas de una tuerta mujer
De mal vivir;
Se difumina agriamente,
Tras los polos machacados del romance inexistente
De ese amor nunca engendrado.



TODOS LOS INVIERNOS PERDIDOS...


Mis ojos no dan más
Mi carne muere
Mi alma se destroza.

La primavera viene acompañada de brotes y tibieza,

De aromas, paz y fortuna.
Sin embargo, mis ojos no dan más,
Mis alas lejanas no llegan a mí,
La espera se torna triste,
Como la luna llena que baña de luz
Estos meses rojos
Esta vida de sangre.

La primavera viene acompañada de praderas y bandolines,

De ensoñaciones y ciclos verdes,
De santos, tañidos y éxtasis.
Sin embargo, mi carne muere,
Muere, en una leprosa caja negra,
Como viento largo que grita en el país eterno
Como cementerio tenue que penetra en mi espacio incierto.

La primavera viene acompañada de claridad, seda y serenidad,

De anillos, bailes y estrellas,
De olas, flautas y cartas.
Sin embargo, mi alma se destroza,
Me envuelve el vaporoso infortunio,
Las conversaciones lunares,
Las experiencias de muerte,
La mortaja final…

Y mis ojos no dan más

Mi carne muere
Mi alma se destroza.

HERMOSA TRISTEZA (LÁGRIMAS DE LA MAÑANA)


“Sé cuerda angustia mía,
Y ten tranquilidad”
(Recogimiento: Baudelaire)

Indeleble, te trazabas,

Por mis puertos de somnolencia agridulce,
Como marejadas de plomo
Que van y vienen por los oratorios enmohecidos;
Te esbozas,
Como médula intuitiva que de mí ya se ha ido,
Como monumento cristalino que flamea
Con cada frontera inextinguible.

Trazabas ilusiones malva en mi tarde sollozante,

En mis rizos de incienso,
En mis faroles de pena,
En la arboleda que circunda mis apacibles hadas de mística naturaleza.

LUNA DE LOBOS


Esplende, alada escuálida,
Retuercete en el horror eterno y mece al rey de los fantasmas,
Quien, como dragón palaciego
Se escabulle tras errabundos conventos.

Haz gala de tus solitarios velos de lluvia,

Al menos, una mínima mueca de tu ávido encanto.

Seduce, acróbata

Humea un pensamiento azul en tu convulsión virginal.

Canto blanco y ardiente,

Querido espasmo ovalado,
Reluce en el absurdo trono,
Quitando aquel secreto a la Nada.

Despojate en tropel

Y suspende un último aliento,
Aliento de arma escondida.